El esperpento del baloncesto español

Pepe Sáenz ha puesto en la calle a Pepu Hernández. Sólo él sabrá los motivos que le han llevado a tomar tan drástica decisión a pocas semanas de la celebración de los Juegos Olímpicos. No hay que saber ni mucho ni poco de baloncesto, más bien nada, para darse cuenta de que la decisión tiene visos de ser un desatino mayúsculo.
Desde que Pepu anunció su marcha del conjunto nacional una vez acabados los Juegos, su relación con Sáenz se deterioró a pasos agigantados. Sin entrar en el fondo de la polémica, en si es o no cierto que Pepu ha faltado al respeto a la Federación y no ha cumplido con sus compromisos, lo que no parece razonable es poner en la calle al seleccionador a tan pocas fechas de los juegos, casi sin margen de maniobra para el que venga por detrás. Y, sobre todo, cuando todo atufa a "vendetta" personal del directivo.
Con el equipo de baloncesto que tiene España, a tan importante cita se va a ganar, que lo de participar está muy bien decirlo cuando eres una nulidad en lo tuyo y vas porque el sistema de cupos te ha permitido ir. Y si para eso tienes que mantener en el cargo a un entrenador que no goza de tu simpatía, lo mantienes. Le pese a Sáenz o no, con Pepu España ganó un Mundial y fue subcampeona de Europa. Y, lo que es más importante, los jugadores estaban encantados con él. ¿Qué sentido tiene echarle ahora? Si Sáenz le quería fuera de la selección, que le hubiese despedido meses atrás, cuando ya era público y notorio que el desencuentro Pepu-Pepe no tenía solución y cuando aún había tiempo para que el nuevo seleccionador pudiese preparar con garantías el campeonato. Pero ahora, no. Ahora procedía aguantarle en el cargo y esperar a que se fuera tras los Juegos. Entonces sí hubiera sido hora de echar a Pepu en caso de que no hubiese querido irse. Aunque dudo mucho que lo hubiera cambiado de opinión.
Ahora, con tan sabia decisión, ya veremos que pasa en Pekín.
Y dicho esto, a ver si empiza pronto la Eurocopa, porque la actualidad futbolística es un coñazo "que pa qué".